El 18 de septiembre se celebró en Nava (Asturias) una nueva edición de la Clásica Puertos Esmeralda sobre un recorrido de 126 km por la bella comarca de la sidra. Los participantes (casi 500) pudieron disfrutar todo el trayecto de la compañía del exciclista Chechu Rubiera que aguantó el chaparrón como todos los demás. Durante la etapa se ascendieron cinco altos: La Campa, El Pedrosu, Buenos Aires, La Llama y La Collá de Pandenes. Sin ninguna duda, el puerto más duro del día no fue, como se esperaba, la Collá de Pandenes, sino la lluvia. Prácticamente la totalidad del recorrido se hizo en mojado, salvo una pequeña tregua en el avituallamiento de Colunga donde lució el sol. Nuestro compañero Carlos se comportó bien en la marcha, yendo en todas las subidas en el grupo de cabeza y realizando toda la etapa sin contratiempos hasta que en plena subida a Pandenes sufrió un inoportuno pinchazo y tuvo que dejar escapar la cabeza de carrera. Al finalizar la marcha, ya de nuevo en Nava, junto al Museo de la Sidra se dio una comida para todos los participantes y sus acompañantes y se entregaron diversos trofeos y regalos, concluyendo de este modo un durísimo día de ciclismo pasado por agua.